La magistrada escuchó las inquietudes de unos 50 allegados de los marinos, durante un contacto de más de tres horas que mantuvo con ellos en simultáneo, en conexión con las localidades bonaerenses de Mar del Plata y Lomas de Zamora, la ciudad de Salta, y la capital de La Pampa, Santa Rosa.
Según relataron a Télam al terminar el encuentro algunos de ellos, los dos principales planteos fueron que se dispongan los medios necesarios para tratar de reflotar el submarino, y que se investigue además si el casco del buque tiene algún tipo de grieta que permita examinar el interior con cámaras o dispositivos sumergibles.
El grupo más numeroso de familiares convocados se concentró en el subsuelo de la Cámara Federal de Apelaciones marplatense, donde se dispusieron dos pantallas: una de ellas, con las imágenes de la sala de audiencias de Mar del Plata, y la otra, dividida entre las otras tres localidades y Caleta Olivia.