En un decreto publicado este viernes, el mandatario estableció la prohibición, durante al menos 90 días, de permitir el ingreso al país a las personas que crucen ilegalmente las fronteras, en una medida que elimina la posibilidad de pedir asilo a quienes la incumplan.
La medida llega luego de tres semanas de advertencias contra la caravana de migrantes, que ahora se encuentra atravesando México y que fue el chivo expiatorio elegido por el presidente para su campaña política de cara a las elecciones del martes. Unas horas después de que Trump firmara el decreto, fue presentada la primera demanda contra el mandatario estadounidense fue presentada en un juzgado.