Y esa adicción, por ejemplo a los teléfonos celulares inteligentes, la ubica encabezando un ranking de alto impacto negativo en la productividad.
La investigación fue acerca de la tecnoadicción y el impacto que tiene en la vida social y laboral el uso de los celulares en los trabajadores argentinos. Los datos surgen de una encuesta telefónica que se realizó entre agosto y octubre de 2018; su análisis se llevó adelante entre noviembre y diciembre del año pasado.