“La industria santafesina finalizó 2018 con un nivel de producción 2,6 por ciento inferior al año anterior”, según datos de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). Metalúrgico, automotriz y oleaginoso, están entre los sectores más golpeados.
El descenso que experimenta la mayoría de las ramas fabriles santafesinas, de acuerdo al informe de Fisfe, fue inducido por la depresión económica, la baja del consumo, de la inversión, del crédito productivo y por los tarifazos.
En el plan económico de Cambiemos, según cifras oficiales, la actividad económica a nivel país cayó 7,5 por ciento en noviembre pasado frente al mismo mes de 2017, el peor registro para el gobierno de Cambiemos. Semejante bajón se explica por el desplome de la industria, que retrocedió en el cálculo interanual 12,6 por ciento, la mayor caída de los últimos años.
“En la medición acumulada enero-noviembre de 2018, la actividad fabril en nuestro país presentó una baja del 3,3 por ciento con relación a igual período de 2017. En noviembre de 2018, el índice de actividad industrial se ubicó un 9,7 por ciento por debajo en el cotejo con el mismo mes de 2015”, cuando desembarcó la nueva Alianza, según recordaron desde el Instituto de Investigaciones Económicas de la Fisfe, que coordina Gabriel Frontons.