Aseguró además que la actual crisis económica que atraviesa el país es producto de las políticas aplicadas por el gobierno de Cambiemos y no dudó en señalar que "Macri defraudó en todo lo que hizo".
El ex titular de la UIA echó por tierra también los argumentos del oficialismo y un sector del empresariado al señalar que "no hay ninguna urgencia" para poner en marcha una flexibilización laboral. En su criterio, aún “hay que revisar muchas cosas”. “Todo tiene su tiempo”, explicó no sin aclarar que él está a favor de una flexibilización laboral.
“Pero no es cuestión de hacerla apresuradamente, sino en el momento y condiciones que corresponda”, de modo tal “que nadie diga que el Estado es débil en la negociación”. “El gobierno hace su juego y los sindicatos el suyo” y “cada uno hace la defensa que le corresponde”, agregó y evitó centrar sus críticas en los gremios. Es más, hasta reconoció que también hay “abusos” de empresarios: “Se tiene que acabar el abuso de los trabajadores pero también el de los empresarios”, sentenció.