Las dos cámaras del parlamento británico suspendieron sus labores el martes de madrugada y no deben reanudarlas hasta el 14 de octubre, dos semanas antes de la fecha prevista del Brexit.
La decisión fue justificada por Johnson por la necesidad de preparar y presentar el programa de política nacional de su nuevo ejecutivo. Sin embargo los opositores a un Brexit sin acuerdo la denunciaron como un intento de atarles las manos.