Sin embargo, la crisis económica del último año hizo necesario amortiguar el impacto de los aumentos, difiriendo la aplicación de los mismos. Es lo que sucedió en diciembre, afectando solamente un 4,5% en naftas y 4,07% en gasoil, cuando el ajuste debería haber sido del 12.5 por ciento.
“Por tal motivo, a partir de enero, el aumento del ICL debería ser del 8% restante en naftas y 8,43 en gasoil”, explica el especialista y consultor Cristian Bergmman en Surtidores.com.
“En términos nominales fueron 50,7 centavos en naftas, y 28,2 centavos en gasoil, pero ahora representa 90 centavos en el primer caso y 58,4 centavos en el segundo”, agrega. Bergmman señala además, que en lo que respecta al impuesto al dióxido de carbono, a partir del 1 de diciembre se aplicó en su totalidad. “Habrá que ver que tratamiento tendrá el Poder Ejecutivo sobre este tema, si volverá a posponer el ajuste trimestral pendiente o lo actualiza”, sostiene.