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Es además un riesgo para la salud y el medio ambiente- pero además prevé generar inversión en la actividad, mayor desarrollo y la promoción de más empleos verdes, que son aquellos que combinan el trabajo decente con la sostenibilidad ambiental.
Al respecto, Garibaldi expresó: “Estamos muy contentos con la sanción de esta normativa porque entendemos que va a ser una oportunidad para aprovechar. En primer lugar porque la provincia se pone a la vanguardia en materia de legislaciones en tema RAEE en la Argentina, además porque estamos proponiendo que Santa Fe pueda empezar a adoptar modelos de economía circular, es decir, fomentar el reciclado, la reutilización y la recuperación de sus materiales como el cobre, aluminio, hierro y oro, y que éstos puedan reinsertarse en la industria. Hablamos de empleos verdes, los empleos del futuro”, explicó.
Para tomar dimensión de la problemática, el diputado comentó que “sólo en 2017, los argentinos generamos unos 8,7 kilos de equipos electrónicos en desuso por persona, de acuerdo a datos de la Universidad Naciones Unidas”. Y añadió que “si pudiéramos juntar todos los celulares, computadoras y electrodomésticos viejos que desechamos cada año en el mundo, su peso sería equivalente a las nueve Grandes Pirámides de Giza, en Egipto”.
Cabe destacar que los aparatos electrónicos están compuestos por un 72% de materiales reciclables como plástico, vidrio y otros, y un 25% de materiales reutilizables como por ejemplo cables y motores. Pero hay un 3% de residuos que no se pueden reciclar ni volver a utilizar como son los gases, plaquetas y circuitos, y ese pequeño porcentaje es altamente peligroso.
