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“Para el mundo era una leyenda, un actor de la época dorada del cine que vivió hasta bien entrada su época dorada, un humanitario cuyo compromiso con la justicia y las causas en las que creía marcaba una pauta a la que todos nosotros debíamos aspirar. Pero para mí y mis hermanos Joel y Peter era simplemente papá”, agregó.
Douglas fue parte de una época importantísima del séptimo arte. Participó en más de 50 películas, en las que se destacó en algunas como Espartaco y El loco del pelo rojo. Kirk estuvo casado en dos oportunidades. Primero, con Diana Dill, madre de sus hijos mayores, Michael y Joel, y luego con Anne Buydens, con quien tuvo a Peter y Eric.
Justamente, con el último de sus hijos vivió uno de los momentos más duros de su vida, cuando murió en 2004 por una mezcla de alcohol y medicamentos.
En 1996 sufrió un ataque cerebro vascular, que lo dejó casi sin poder hablar. En el mismo año, recibió de parte de la Academia un Oscar Honorifico por su trayectoria en el cine. Cuando comenzaba a actuar tuvo que detener su carrera para servir a los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial.
