El Destape asegura haber accedido a documentos secretos donde queda al descubierto la maniobra por la cual el programa de Protección de Testigos, que funcionaba bajo la órbita del ministro de Justicia Germán Garavano, "fue utilizado para presionar, direccionar y premiar a arrepentidos que cumplieran su tarea: apuntar a ex funcionarios K.
En este caso, al ex vicepresidente Amado Boudou". Se trata del hotel boutique La Masía que el arrepentido Vandenbroele gestiona en Mendoza gracias a fondos que le proveyó el gobierno de Macri. Casualmente, en las últimas horas, la página web del hotel se encuentra fuera de servicio. Leé más: Por culpar a Boudou, el macrismo le puso un hotel a Vandenbroele