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Para Megna “los dueños de los locales no pueden elegir a las personas que entran a los VIP según su condición social, vestimenta o apariencia física como ocurre frecuentemente por éstos días” esto genera trato desigual”.
El proyecto propone eliminar la denominación VIP que hace referencia a “gente muy importante”, por lo que ya induce a una denominación discriminatoria. Asimismo, para evitar la evasión de la normativa, el proyecto establece que las entradas/pulseras de acceso a los sectores diferenciales se ofrezcan luego de informar con claridad que se encuentran disponibles entradas generales y que ambas son accesibles para todos.
“Actualmente se observan situaciones de clara discriminación cuando particulares deciden autoritariamente quiénes entran y quiénes no”, añadió el edil quien agregó además consideró que “el Estado observa esas situaciones sin reaccionar, provocando desconfianza en el poder de cambio y solución y es el municipio quien debe actuar en estos casos”.
Para finalizar, Megna remarcó que ingresaron otros proyectos años anteriores que pretendieron prohibir los VIP en la ciudad de Rosario, pero que no prosperaron por ir contra las ordenanzas vigentes teniendo en cuenta que no se puede impedir a los dueños tomar decisiones sobre sus propiedades privadas.
“El punto de inflexión radica en cuando esas decisiones significan un trato discriminatorio”, agregó. La muerte de Carlos Orellano demuestra cruda y cruelmente cómo la inacción del Estado puede dar lugar a tragedias, porque , de haber legislado sobre éste tema antes quizás hoy no se estaría llorando la muerte de un joven.
