Esos barbijos fueron fabricados en mayo de 2013 y tenían una vida útil de tres años, por lo que deberían haber quedado fuera de circulación a mediados de 2016.
El escándalo arrancó por un supuesto sobreprecio. Luego de dos licitaciones desiertas, la firma Green Salud, del abogado Ignacio Sáenz Valiente, le vendió a la Ciudad 1.600 barbijos de la marca 3M a $3000, muy por encima del valor de mercado pese a las condiciones de urgencia.
De hecho, una prepaga de primer nivel compró en los últimos días un modelo similar de la misma marca a menos de $1000, pudo saber este medio. Green Salud debutó literalmente con la venta de barbijos a la Ciudad. No registraba ventas anteriores a la Ciudad.