Desde su primera impresión en diciembre de 2017, el billete de $1.000 perdió un 85% de su valor, como consecuencia de la fuerte devaluación que afrontó la moneda de curso legal, según un informe privado.
En poco más de tres años, pasó de valer US$ 57,37 a los US$ 8,44 de la actualidad, tomando la cotización del Contado con Liquidación, un tipo de cambio que se pacta en la Bolsa de Comercio para compra de títulos y acciones.