Un abogado presentó el 24 de abril un escrito donde informaba de un video que circulaba por redes sociales con el testimonio de un médico que se desempeña en ese complejo y que contaba de qué manera estaban trabajando.
Para el abogado, exponía “hechos que podrían configurar fuentes de contagio” y requería que se investigue la situación por “estrago culposo”. “No cabe dudas que la pandemia de coronavirus está causando grandes estragos entre la población mundial”, sostuvo en su presentación.
En el dictamen, el fiscal Kishimoto explicó que para que se configure el tipo penal el estrago debe haberse producido y “debe haber una relación de determinación directa con la violación al deber de cuidado que se le impute al sujeto activo”. Señaló que resultaba “claramente evidente” que la pandemia por covid-19 no fue producida por el personal o por los directivos del Complejo Pami 2.