“El objetivo es mejorar todo el sistema de salud, no sólo en camas críticas, sino con toda la tecnología que haga falta. Así como estuvimos viendo en estos días en depósitos y en stock, todos los elementos de protección personal que tanto nos interesaban para la bioseguridad del equipo de salud, también estamos visitando cómo han quedado las instalaciones, la nueva unidad coronaria y la terapia pediátrica”, señaló Martorano tras recorrer el lugar.
Con los cambios, el área de coronaria pasó a ser terapia intensiva no COVID-19, y la, hasta ahora, terapia intensiva servirá para tratar a pacientes críticos con coronavirus. “En estas áreas se han sumado muchas camas críticas completas con bomba de infusión, respiradores nuevos y monitores multiparamétricos.
Esto es un gran aporte que va a quedar en el Hospital Provincial de Rosario -una institución señera con 180 años de existencia-, para después del COVID-19, reforzando el sistema de salud”, explicó la secretaria de Salud.