Con un estricto protocolo, que incluye la provisión de materiales descartables, el uso de elementos de bioprotección para el aseo de las habitaciones y siguiendo estrictamente las recomendaciones que el nuevo protocolo establece para la ocasión, tras algo más de noventa días cerrados, funcionan nuevamente a pleno la veintena de establecimientos del rubro.
Todavía la novedad no era conocida por la mayoría de sus ocasionales clientes, pero de a poco, tibiamente las habitaciones se fueron llenando al anochecer y todo pareció volver a una normalidad atenuada claro, no sobran recursos en tiempos de pandemia, sin embargo, hay inversiones que no se dejan de lado, por más crisis que pueda haber.