“Estoy movilizando todos los recursos federales disponibles, civiles y militares, para parar los disturbios y saqueos, para parar la destrucción e incendios provocados. Y para proteger los derechos de los estadounidenses que respetan la ley”, señaló desde la Casa Blanca.
En esa línea, avisó que recomendó a los gobernadores “desplegar a la Guardia Nacional para tomar las calles” para “detener los disturbios, los saqueos, el vandalismo, los asaltos y la destrucción sin sentido de la propiedad”.
En caso de que éstos se nieguen, adelantó: “Si una ciudad o estado se niega a tomar las medidas necesarias… entonces desplegaré el ejército de los Estados Unidos”. Denunció, además, que el país “está siendo atacado por anarquistas profesionales”, y sostuvo: “Estas no son protestas pacíficas, esto es terrorismo nacional”.
El mandatario indicó que a partir de las 19, hora local, habrá toque de queda, y advirtió: “Quien viole la ley será detenido y se enfrentará a cargos criminales”.
Trump aseguró que su administración está “comprometida” a que se haga justicia por la muerte de Floyd: “Prometo llevar justicia a la familia de George Floyd, pero no podemos permitir que los manifestantes pacíficos sean desplazados por turbas. Como Presidente lucharé por mantener a salvo y proteger a los norteamericanos”.