En un partido correspondiente a la primera fecha de las Eliminatorias Sudamericanas, la selección argentina venció en la cancha de Boca a Ecuador por 1 a 0 con gol de Lionel Messi de penal, en la primera etapa. El partido fue chato, de muy bajo nivel técnico, y se notó demasiado la falta de competencia de la mayoría de los integrantes del combinado nacional. El próximo martes a las 17 enfrentarán a Bolivia en La Paz.
Si alguien tenía ganas de ver un poco de fútbol se habrá quedado con las ganas seguramente. El equipo de Scaloni no tuvo ideas, nunca encontró un conductor, ni Messi ni De Paul pudieron convertirse en la manija del equipo, Ocampos y Acuña no pudieron explotar por los laterales ni romper líneas. Paredes fue el único que trató de aportar algo desde el sacrificio, pero fue todo anodino. Defensivamente se jugó bien, pero es cierto que el rival nunca exigió. Martínez Quarta mostró firmeza cada vez que fue llamado a intervenir.
Apenas un penal muy dudoso cobrado por el árbitro chileno por una entrada abajo contra Ocamposo que permitió a Messi poner en ventaja al conjunto albiceleste fue lo único destacable de la primera etapa. Hay que ir a la última jugada del partido, en el minuto 94' con un disparo desde afuera de De Paul para encontrar otra situación de peligro.
Ecuador, dirigido por Gustavo Alfaro, fue apenas un parteneire, no pateó al arco en todo el partido y Armani fue un espectador de lujo, tocó mucho más la pelota con sus pies que con las manos. Como positivo queda solo el resultado, comenzar ganando aunque sea jugando mal suma, ya habrá tiempo para encontrar funcionamiento y mejor juego.
