Rosario Central y Unión de Santa Fe igualaron 2 a 2 esta tarde/noche en el Gigante de Arroyito en un encuentro correspondiente a la Zona Complementación de la Copa Diego Armando Maradona. Los goles auriazules fueron señalados por Nani (EC) y Marinelli, en tanto para la visita marcaron González y Cabrera. Con este resultado el Canalla lidera su zona junto a Lanús y Defensa y Justicia con 4 unidades pero los aventaja por diferencia de gol.
El partido arrancó con un Central cauteloso y Unión yendo al ataque aprovechando la franja izquierda de la defensa auriazul. El "Vasco" Azconzábal colocó por allí a González, que fue una pesadilla para Sangiovani, un volante reconvertido en marcador que no tiene demasiado oficio jugando de 4, pero tan bajo es el nivel de Martínez, que el Kily le otorga esa responsabilidad.
Pasó lo que podía suceder, González marcó la diferencia, apiló a tres en carrera, dejó todo lo que se le cruzó por delante, no lo cruzaron con falta, ingresó al área y con un remate potente batió a Romero en el primer palo. El golpe lo sintió Central, y tardó algunos minutos en acomodarse y recomponerse.
Sobre los '21 la fortuna quiso que llegara al empate por una jugada por derecha que un defensor de la visita, Nanni, que marcó su cuarto gol en contra en su carrera, convirtió en el empate por sobre el cuerpo del arquero, cuando Vecchio ya se relamía ingresando en posición de 9.
El capitán jugó infiltrado y se notó en la falta de ritmo, con su conductor averiado, al Canalla le costó armar juego, dependía de la velocidad de Marinelli, y que Gamba pudiera aportar algo en ataque, que por cierto fue muy poco. Blanco fue salida siempre por izquierda, pero le faltaban socios y sobre todo, encontrar alguien en el área para tirarle el centro.
Una guapeada de Fito Rinaudo, con un remate desde afuera provocó que el arquero diera rebote y Marinelli puso el 2 a 1, marcando su tercer gol en apenas tres partidos. Unión había hecho mérito para no irse en desventaja en la primera etapa, pero el local aprovechó lo poco que tuvo y se fue a los vestuarios con una sonrisa, sin jugar un buen primer tiempo.
En el segundo tiempo fue todo de Unión, que replicó sobre el arco de Central hasta conseguir el empate. Sin poder pasar el juego por Vecchio, que quizás no debió haber jugado, a este equipo se le terminan las ideas. Intentó defenderse, pero sin la pelota, los delanteros no la aguantaban ni diez segundos y todo era correr sin posesión. El elenco local terminó con toda su línea media amonestada, se llegaba tarde siempre, se corría atrás de la pelota y se perdían todas las segundas pelotas.
El empate estaba al caer, Romero ya había sacado un par de pelotas con destino de gol, incluso una doble tapada notable. El arquero de Central ataja bien abajo de los tres palos, pero no sale nunca y eso, en cada pelota parada traía peligro, sólo por impericia del rival no terminó en gol en varias oportunidades. Central fue superado en toda la segunda mitad, el empate llegó de un zapatazo desde afuera del área de Cabrera y terminó sufriendo, casi pidiendo la hora.
Kily González demoró lo cambios, le empataron faltando '15 para el final y recién a los '87 reemplazó a Marinelli, que había jugado mucho mejor que Gamba. Puso en ese mismo momento a López Pisano por Lo Celso, estando Vecchio tocado, y a Ojeda por Villagra, de gran partido pero amonestado. Poca ambición de dar vuelta el partido. El empate fue justo, pero si debía haber un ganador, era el Tatengue, que dominó claramente la mayor parte del partido.
