Los gorditos, cualquiera fuera el sexo o tamaño, siempre tuvieron problemas para vestirse. Las fábricas de ropa, en su gran mayoría no realizan talles grandes. No es un tema exclusivamente de Argentina, sucede en todo el mundo, pero en nuestro país es casi imposible conseguir atuendo para personas con algún grado de obesidad, siendo que la población que padece la enfermedad es superior al 50%.
Por eso, el Congreso de la Nación sancionó una ley de talles, que obliga a las empresa a confeccionar prendas de todos los tamaños, pero no se cumple, como tantas otras leyes en el país. No hará falta ni siquiera recorrer las tiendas, simplemente con estar frente a una computadora y elegir las prendas que nos ofrecen por los algoritmos de Google, para verificar que el talle XL y XXL, es inexistente.
Sería muy sencillo para los entes fiscalizadores ingresar en los portales de venta online, tan utilizados por estos días en los que la pandemia alejó a la gente de los mostradores, poder verificar que no se fabrica ropa grande. No estamos hablando de ropa enorme, hablamos de prensa para mujeres de 80 kilos y hombres que pesen 100, no hiper obesos, que ya tienen que buscar directamente en lugares especiales.
El conductor de El Trece, Darío Barassi, de exitoso ciclo en la actualidad, señaló al aire de su programa los otros días que "no es fácil conseguir ropa copada con este tamaño", refiriéndose a su cuerpo. Tiene la suerte de ser famoso, que varias marcas quieran vestirlo, pero es un caso especial. No todo el mundo tiene esa ventaja, de ser famoso, de estar en la tele y tiene que resignarse a ponerse ropa que no siempre es de su agrado. Las grandes marcas, nacionales e internacionales no fabrican ropa para gordos y gordas, es una realidad, que la ley no pudo modificar.
