En un partido correspondiente a la primera fase del Grupo F de la Copa Sudamericana, Newell's igualó sin goles ante Goianiense de Brasil. Con un planteo defensivo, corriendo y metiendo en cada pelota, sin lucir, el conjunto rosarino consiguió lo que fue a buscar, no perder en Brasil. Quedó pendiente convertir, algo que no a logrado nunca en visitas al país vecino.
Burgos salió con Cingolani a hacer el trabajo del lesionado Cristaldo, cuando todo indicaba que el goleador rojinegro, Ignacio Scocco sería su reemplazante. Por el otro lado puso a Marcioni, dos jóvenes para darle velocidad y marca. Con Pablo Pérez jugando casi de enganche y las proyecciones de Negri y Cacciabue por los laterales.
El local es un conjunto limitado, que como todo equipo brasileño trata bien la pelota, tiene pocos argumentos ofensivos juega sin referencia de área y le falta astucia para generar en ataque, desbordaban por los costados, pero no tenían receptores. Hubo en la primera etapa pocas acciones de gol, dos para La Lepra y una para Goianiense, que solo mostró alguna gambeta individual en el mano a mano como mayor virtud.
Negri cumplió con su obstinada costumbre de romper por izquierda y pegarle al arco, rebotó como casi siempre, pero esta vez no fue gol, se fue apenas desviada por el palo derecho. Más tarde, Maxi encontró a Lema, se la puso en la cabeza por el segundo palo, y el defensor prefirió bajarla para un compañero imaginario, cuando por su posición ameritaba un cabezazo al arco. Gómez exigió a Aguerre con un remate al primer palo en la única que tuvieron los locales.
En la segunda etapa Newell's decidió dar por terminado el partido y apostó a empatar. Burgos fue reemplazando jugadores que iban sintiendo el desgaste, con la clara consigna de poner todos atrás de la pelota. Se le ocurrió al joven Cingolani intentar salir a hacer presión alta y rápidamente fue corregido por el entrenador para que retroceda y tome posiciones defensivas.
Apenas se habían jugados segundos de la segunda parte y tras un remate desde la derecha la pelota se fue muy cerca del palo de Aguerre. El uno rojinegro se lució al salvar su arco ante una gran jugada individual. En la última para el local, Llano salvó sobre la línea una clara en la que el arquero llegó a desviar, pero estaba vencido.
Fue un empate chiquito, ante un rival limitado, sin peso futbolístico. Podría decirse quizás que se ganó un punto, pero también que se perdieron dos, es probable que los otros equipos de la zona puedan llevarse algo más de Goiania, teniendo en cuenta la fragilidad del elenco local. Se consiguió lo que se fue a buscar, quizás arriesgando podría haberse llevado más, pero eso no parece estar por el momento en la impronta que Burgos le da al equipo.
