"Si cumplimos el sendero de bajar el gasto público y el déficit fiscal, el país no va a estallar. Esto no es sostenible a largo plazo, es una situación de altísima fragilidad. Si se gasta mucho más que lo que los argentinos pueden pagar de impuestos, que son de los más altos del mundo. Además los servicios públicos como la salud y la educación empeoraron", señaló.
El jefe de Estado remarcó el objetivo de su Gobierno de reducir la inflación a un dígito anual para 2019, para lo cual consideró fundamental disminuir el gasto público y el déficit fiscal, además de acotar los costos de la política.