La causa judicial se había iniciado el 3 de Mayo del año pasado con la presentación de una querella por parte de Marcelo Frydlewsky, quien se sintió "agraviado" a raíz de una serie de tuits publicados por Mónica Lang. El delito por calumnias e injurias está tipificado en los artículo 109 y 110 del Código Penal, pero nunca había sido aplicado en la Argentina para agravios vertidos en las redes sociales.
Frydlewsky, realizó la presentación de la acción penal a través de su abogado Jorge Monastersky, quien explicó el caso a Télam y dijo que "de ahora en más los tuits con agravios no serán gratuitos".
"Se consiguió poner un límite y de ahora en más, decir cualquier cosa en las redes va a ser castigado", precisó el abogado.
Daniel Monastersky, especialista en derecho informático del mismo estudio, le dijo a Télam que este tipo de delitos "no es difícil de demostrar pero pocas veces se denuncia, por eso, lo original y positivo de esta resolución es que muchas personas se den cuenta de que sí pueden hacerlo y de que hay un fallo de la justicia que los apoya. Es importante porque hoy en día sos quien Google dice que sos".