Heredó de su padre la militancia peronista, y de su vecino la pasión por San Lorenzo. Pero fue en el movimiento de curas del Tercer Mundo donde entendió que “la política está en todos lados y es la herramienta para poder cambiar”.
Uno de sus grandes orgullos en vida era cuando mencionaban su nombre junto al del “padre Carlos Mujica y el obispo Enrique Angelelli” recordaba siempre.
Farinello siempre se mostró a favor del celibato optativo, fue un cura de mente abierta y reconoció haberse enamorado e incluso haber sufrido por amor “dos veces”.
Fue uno de los precursores del partido Polo Social y candidato a senador nacional por la provincia de Buenos Aires en el 2001. También formó parte de la TV Pública donde realizaba las reflexiones religiosas.