En datos comparativos Rosario debe el doble de Córdoba y cinco veces más que la Provincia. El precandidato a intendente por el Frente Justicialista para la Victoria, Roberto Sukerman remarcó que éstas cifras surgen de la rendición de cuentas que la misma Municipalidad envió este jueves último al Concejo.
En ese sentido indicó que "no solo han aumentado las deudas con la sociedad en todas las órbitas, ya que no hay obra pública, no hay un sistema de transporte acorde con la demanda, no hay seguridad ni mantenimiento en infraestructura, sino que además hacen un pésima administración del dinero de todos los rosarinos".
Asimismo, el abogado constitucionalista señaló que "esta situación no se le puede achacar a ninguna situación coyuntural porque los recursos corrientes estuvieron más de un 10% por encima de lo presupuestado. Es imperioso repensar toda la gestión económica municipal, hay que gestionar las compras municipales y el pago a proveedores de forma eficiente y en sentido contrario a lo realizado por Fein.
También es hora de preguntarnos si el hecho de que nuestra industria migre a ciudades vecinas no representa un costo en términos fiscales para nuestra ciudad. Lo que está más que claro es que Rosario no puede seguir gastando mal e invirtiendo poco y encima operar con déficit y por lo tanto incrementar más aún su deuda".
Por su parte, Norma López, actual vicepresidenta del Palacio Vasallo y precandidata a diputada provincial aseguró que "la gravedad de la situación está dada porque los constantes déficits no permiten una correcta gestión de la deuda y los pagos a proveedores, lo que termina generando un circulo vicioso perjudicial para las arcas municipales que cargan cada vez con una deuda mayor".
Los ediles resaltaron que "Rosario es municipio altamente endeudado, cuya deuda es por ejemplo casi doble de la ciudad de Córdoba, si lo comparamos en términos de los recursos corrientes, o cinco veces más de lo que debe nuestra provincia".
En ese sentido aseguraron que "al gobierno de Fein no se le cae una sola idea a la hora de reducir el déficit y termina optando por reducir las inversiones previstas, prueba de esto es que para 2014 se presupuestaron gastos de capital por 543 millones de pesos y sólo se ejecutaron 322 millones; es decir, de cada $10 de inversión pública municipal presupuestados sólo le llegaron al vecino 6 pesos. Esto es menos pavimento definitivo, menos cloacas, menos poda, menos luminarias o el aire acondicionado faltante en los últimos colectivos adquiridos".
Sukerman finalizó asegurando que "confiamos en que de asumir el 10 de diciembre podremos revertir esta situación y gestionar de forma más eficiente, velando por el desarrollo personal de cada agente en su puesto de trabajo y no con la solución simplista del achicamiento del Estado, que otros proponen y cuyos resultados nefastos ya conocemos".