Durante el encuentro, que tuvo lugar en la Asociación Israelita de Beneficencia Kehilá Rosario (Paraguay 1152), la intendenta contó su experiencia en el Vaticano en la que participó, junto intendentes y gobernantes locales de 49 ciudades y representantes de Naciones Unidas, del foro sobre esclavitud moderna y cambio climático, organizado por la Academia Pontificia de Ciencias y la Academia Pontificia de Ciencias Sociales.
“Dentro de las problemáticas que expusieron los representantes de algunas ciudades que asistieron al encuentro en el Vaticano están las migraciones masivas por distintos motivos y las dificultades de esas ciudades para abarcar esa problemática”, contó Fein.
Agregó que también se hicieron exposiciones “sobre el tráfico de órganos, el cambio climático y las acciones que están llevando adelante algunas ciudades, como por ejemplo la utilización de energía renovable para mejorar la calidad del agua y del aire. Algunos dieron testimonios sobre la explotación sexual y laboral en sus ciudades. Luego de esas exposiciones, el papa Francisco planteó que las ciudades tienen un rol que cumplir que es sumar a la ciudadanía a participar activamente y a comprometerse en los grandes temas de la humanidad”.
Asimismo, leyó un párrafo de la declaración firmada sobre el cambio climático y la esclavitud moderna, que refiere a que “los líderes políticos de todos los Estados Miembros de la ONU tienen la especial responsabilidad de consensuar, en el marco de la COP21, un osado acuerdo en pro del clima que confine el calentamiento del planeta a un límite seguro para la humanidad, y que proteja a los más pobres y vulnerables del cambio climático ininterrumpido, que pone sus vidas en grave peligro. Tal como lo han prometido, los países de altos niveles de ingresos deben ayudar a financiar los costos de la mitigación del cambio climático en las naciones más necesitadas”.
El documento agrega que “para revertir el cambio climático antrópico, será necesaria una veloz transformación que haga de nuestro hábitat un mundo impulsado por energías bajas en carbono –entre ellas las renovables–, y fundado en la gestión sostenible de los ecosistemas