"Fue una leyenda de nuestro juego y amado por los fans acá y en todo el mundo", agregó Tew. Números impresionantes A Lomu siempre le fue bien, independientemente de la suerte de su equipo. El gigante wing neocelandés de 1,96 metro y 120 kilos, capaz de correr los 100 metros en 10,89 segundos, dejó una huella imborrable en el rugby.
Fue precisamente entre los mundiales de Sudáfrica 1995 y Gales 1999 que demostró que era una bestia. En ese período pulverizó todos los récords y desde entonces ostenta la marca de 15 tries en copas del mundo. Una marca imbatible (el sudafricano Bryan Habana la igualó en 2015).