El proyecto de Macron contempla un mes de servicio para hombres y mujeres de 18 a 21 años. El objetivo, según el programa de Macron para las elecciones del pasado mayo, es ofrecer a los jóvenes "una experiencia ciudadana de la vida militar, de la mezcla social y de la cohesión".
Debe servir para que los jóvenes "reciban una formación militar elemental: disciplina y autoridad, conocimiento de las prioridades estratégicos del país y de las grandes problemáticas de la seguridad, actividades físicas y deportivas".
Al presentarse en marzo de 2017, el plan topó con críticas, algunas procedentes del estamento militar. Muchos entendían que a unas fuerzas armadas embarcadas en operaciones bélicas y antiterroristas, dentro y fuera de las fronteras francesas, y sometidas a recortes presupuestarios, no les correspondía además ocuparse de la educación de la juventud.
"Deseo que cada joven francés tenga la ocasión de una experiencia, incluso breve, de la vida militar. Se instaurará pues un servicio nacional de corta duración, obligatorio y universal. Se trata de un proyecto de sociedad de calado, un verdadero proyecto republicano, que debe permitir a nuestra democracia estar más unida y aumentar la resiliencia de nuestra sociedad", dijo Macron cuando presentó el plan en plena campaña.