Dentro de los reclamos estarán los de deficiencias e interrupción del servicio en tres días hábiles; por facturación en cinco días hábiles y "otros reclamos" en diez días hábiles. Los incumplimientos "darán derecho a los clientes a una compensación", asegura la regulación.
El prestador "no podrá modificar, sustituir o eliminar los canales que componen el servicio sin previo aviso al cliente, con una antelación no menor a 60 días corridos previos a su implementación, pudiendo el cliente optar por la baja del servicio sin cargo".