“El amor entre un hombre y una mujer, cuando es apasionado, te lleva a dar vida para siempre, y a darla en cuerpo y alma”, aseguró. En este sentido, criticó el sexo fuera del “hermoso camino de amor entre el hombre y la mujer”.
“Es cierto que nuestras debilidades, nuestras caídas espirituales, nos llevan a usar la sexualidad fuera de este camino, pero son caídas, como todos los pecado”, aseguró.
El papa señaló que “la más bella dimensión de la creación de Dios es también el más usado por el espíritu del mal” y apuntó a la pornografía como ejemplo de una “industria del sexo separada del amor”. “Se está haciendo mucho dinero con este oficio”, lamentó.
Por último, dijo a los jóvenes: “Cultiven su dimensión sexual, tu identidad sexual. Prepárenla para el amor, para ese amor que te acompañará durante toda la vida”.