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En otro orden dieron cuenta de la suba del boleto del 102% entre enero 2018/enero 2019, y de un menor flujo de pasajeros incluso que en los años 2001-2002. Además señalaron una mayor deficiencia del servicio, un mayor costo para el pasajero, y la baja de frecuencias con una reducción del 20% de unidades en circulación.
“Además de un brutal aumento del boleto, los privados exigieron esos beneficios para arrancar con el nuevo pliego, y ahora el que paga las consecuencias es una vez más el usuario”, amplió el titular del Observatorio Social del Transporte. “No nos preocupa la disputa entre empresas. Nos preocupa la realidad de los usuarios del TUP”, agregó Toniolli.
Por último advirtió que “el Municipio esconde el incumplimiento del nuevo pliego, posponiendo una vez más la mejora del servicio, en esta ocasión para el segundo semestre, para de esta manera reeditarla como promesa electoral”.
El informe indica reducción de servicios en Rosario Bus, con 28 unidades menos circulando por día repartidas entre sus distintas líneas, con casos extremos del 20 % del plantel en líneas como la 102 Roja, 106 Roja y 125; y en El Cacique, con 12 unidades diarias menos en la totalidad de sus líneas, afectando al 19 % del plantel de la línea 115 y al 18 % de la línea 122 Roja.
