Las versiones van y vienen y lo seguirán haciendo en las próximas horas. Se habla de un divorcio al menos momentáneo entre el jefe del partido en la provincia, Federico Angelini y el principal candidato a la intendencia, Rodrigo López Molina, no está confirmado, pero se especula ruptura, algo que Peña buscará evitar, porque el objetivo principal, sigue siendo ganar Rosario.
La incursión de Boasso, fue un detonante inesperado, la caída de Mac Allister avivó a los radicales que el PRO pasaba por su peor momento y comienzan a disputarle lugares dentro de su propio espacio político. Roy no quería internas y esperaba ser ungido por unanimidad y aclamación, pero no sucedió y ahora habrá que esperar para ver que podrían ofrecerle a Boasso para declinar su candidatura, algo que no será sencillo, ya rechazó incluso puestos nacionales y no suele ser presa fácil de ofertas, por más tentadores que sean.