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Loa casi siete mil votos que separaron a Javkin sobre Sukerman le dieron algo de respiro al socialismo, pero no alegría, al punto que se fueron temprano del bunker electoral y dejaron en soledad al reducido grupo de militantes del espacio político del intendente electo.
Buena parte de la victoria de Perotti se había construido desde el departamento Rosario, donde se impuso con amplitud, y eso hizo mella puertas para adentro. La derrota de Fein frente a Lewandosky tanbién caló hondo en el ánimo socialista, que ahora deberá repensar estrategias para volver al ruedo.
El flamante intendente electo se apoyará en su experiencia para gobernar en un principio, hasta tomar un perfil propio, y ellos lo acompañarán en en el comienzo, pero insistirán en un pronto regreso al Palacio de los Leones, más temprano que tarde.
