Una adolescente holandesa de 17 años, Noa Pothoven, obtuvo -tras una larga batalla legal- la eutanasia, legal en Holanda, después de años de sufrimiento psíquico por una violación sufrida de niña.
La adolescente murió el domingo en su casa, con la asistencia médica que le proporcionó una clínica especializada. Había dicho que no soportaba más vivir debido a su depresión.
Tras la violencia padecida sufría también de estrés postraumático y anorexia, informó la agencia ANSA.