![]() |
“Por lo tanto, el tipo de cambio debe tener una flotación administrada con intervención del Banco Central y no debe retrasarse respecto a la inflación”, evaluó.
El ex funcionario comentó que “siempre en los períodos electorales está la tentación de atrasar el tipo de cambio, porque está la relación que la popularidad del Presidente aumenta cuando se estabiliza o se aprecia el dólar”.
Advirtió que “ésto es como la ley de gravedad: en algún momento se corrige y lo ideal sería no compararlo día a día con respecto a la tasa de inflación, pero que en un período de dos o tres meses el tipo de cambio no se atrase porque en algún momento termina corrigiéndose”.
Para Redrado, “está claro que si la inflación se estabiliza en 2,5% mensual y el tipo de cambio se queda planchado ahí, con el correr del tiempo, se va a ir acumulando” el retraso de la cotización.
“Lo mismo que nos pasó en 2017 o en los seis meses del plan del Fondo Monetario. Con lo cual, no se puede tapar el cielo con las manos. La clave es bajar la tasa de inflación“, enfatizó.