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En el legislativo local, el Concejo Municipal tuvo dos sesiones en las cuales se aprobó el Presupuesto y otras cuestiones inherentes a la ciudad, las últimas de este año y el anterior, que terminaron a las 7 y 8 de la mañana del día siguiente.
Si bien el debate no se extendió tanto en el recinto, y se trató de sesiones de entre cinco y seis horas, el horario de comienzo fue muy tardío. Tras un prolongado día de reuniones abiertas, de comisiones prolongadas y acuerdos que llegaron bastante tarde, se recurrió incluso a llamados a cuarto intermedio para extender el horario de inicio.
Apenas un par de medios quedaron el palco de periodistas, para seguir el debate parlamentario, <bastante pobre por cierto> debido al cansancio y agotamiento de los oradores tras una jornada que se prolongó por más de veinte horas.
Siguiendo la iniciativa nacional, hay concejales dispuestos a impulsar una Resolución para exigir que las sesiones tengan comienzo hasta las 22, de lo contrario pasarlas al otro día hábil. De esta forma, quienes quieran seguir el desarrollo de la reunión por Internet, o los medios que cubren habitualmente las sesiones podrían tener acceso al debate. Una ciudad que se precia del orden, con una administración que puso límite a algunos excesos nocturnos, debería ser el ejemplo de trabajar de cara a la sociedad.