Foto (Secretaría de Control, y Convivencia) |
En Rosario, y otros puntos del país el panorama fue bien diferente, desde hora temprana, la Secretaria de Control y Convivencia, asistida por la Policía, la GUM y agentes de Tránsito, sumados a personal bancario armaron un eficiente operativo para la contención de las personas de la tercera edad.
Se colocaron gran cantidad de sillas a prudencial distancia en las calles adyacentes a las entidades bancarias, sirvieron café a los abuelos, se los proveyó de alcohol en gel y además se los asesoró en la misma cola, sobre si podrían cobrar su jubilación hoy, o tenían asignada otra fecha.
Cuando se quiere se puede, nadie duda que resultó innecesario exponer a los ancianos al desmadre que se produjo ayer por impericia e imprevisibilidad. Anses, el Banco Nación y el Sindicato Bancario no estuvieron a la altura de las circunstancias. Había que mejorar y se hizo rápidamente, que es lo más importante. Las consecuencias de lo sucedido el vienes negro se sabrán a futuro y repercutirán en la estadística próximamente, deberá haber responsables.