El Senado sancionó hoy la nueva Ley de Alquileres, que establece contratos más largos y amplía las opciones de garantía para los inquilinos, entre otros cambios respecto de la legislación actual.
La nueva norma extiende los contratos de dos a tres años y señala, además, que la actualización del valor deberá ser anual y ya no semestral. Juntos por el Cambio se retiró virtualmente del recinto y no acompañó la sanción de la ley.
El aumento anual deberá hacerse sobre un índice conformado por las variaciones mensuales del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el de salarios (RIPTE).
Por otra parte, la iniciativa establece que «los contratos de locación deben ser declarados por el locador ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP)», un punto importante porque evitará la firma de contratos «en negro».
