Si el proyecto avanza, y el ministro Matías Kulfas empuja que así ocurra, los consumidores podrán comprar un calefón, una motocicleta o vestirse y calzarse, comenzando a pagarlo tres meses después.
Una idea cuyo objetivo es incentivar el consumo, que se planteó mirando los datos desagregados por geografía nacional según la fase de cuarentena que están transitando. “En algunas ciudades del interior, el crecimiento interanual de Ahora 12 es del 40%, registrando niveles de consumo pre-pandemia”, se entusiasmó una fuente oficial.
El plan de tres meses de gracia, una enorme facilidad a la hora de pagar un bien de consumo durable y semidurable, se extendería a todos los productos. Por lo menos eso es lo que pretende el Gobierno. Con la excepción de aquellos productos que sólo se pagan en 3 y 6 cuotas: alimentos, bebidas, higiene personal, limpieza y medicamentos.