El ex Unión e Independiente estuvo trabajando durante varias semanas a contra turno y a raíz del planteo que realizó el futbolista por un malestar con uno de los preparadores físicos del plantel profesional. La salida se propició ante la cercanía del cierre del libro de pases y se materializó a cambio de 350.000 dólares por el 50 por ciento del pase.
Ese dinero será destinado por los Canallas para saldar parte de la deuda que sostienen con Unión de Santa Fe, compromiso que habían asumido para lograr, como contrapartida, la quita de la obligatoriedad de compra del 50 por ciento del pase de Damián Martínez.
