Tras dos casos graves -uno de ellos fatal- de coágulos sanguíneos en personas que recibieron una primera inyección, Dinamarca fue la primera nación europea en suspender por completo el uso de esta vacuna el 11 de marzo. Pero este miércoles anunció la decisión final: “La campaña de vacunación en Dinamarca continúa sin la vacuna de AstraZeneca”, dijo el director de la Agencia Nacional de Salud, Soren Brostrom.
“Existe una eventual reacción cruzada entre la vacuna y un bajo número de plaquetas. Sabemos también que existe una conexión temporal. La reacción ocurre de uno a diez días tras la inoculación con AstraZeneca”, indicó.
En tanto, explicó que la decisión se tomó con la mayor parte de la población de riesgo inoculada. Por su parte, Sudáfrica también renunció a las dosis en febrero, mientras que Estados Unidos y Suiza aún no la autorizaron.
