En el primer partido de la selección de Scaloni en la Copa América, la selección Argentina empató con Chile 1 a 1. Los goles del encuentro fueron señalados por Lionel Messi de tiro libre y Vargas, de cabeza, tras un penal que había atajado el arquero argentino.
El elenco nacional agrupa buenos nombres, con gran presente en la mayoría de sus clubes, pero eso no garantiza funcionamiento. Un par de pinceladas de Lo Celso habilitando a Nicolás González habían marcado la diferencia, pero el arquero chileno se lució. Messi la clavó de tiro libre, esta vez eligió algo más de violencia y no tanta precisión. Con el 1 a 0 se fueron al descanso, Chile había llegado apenas una vez con un remate cruzado que se fue por el segundo palo.
Pero en el complemento salió a buscar, Argentina, como cada vez que esta en ventaja se replegó, esperó sin la pelota y una torpeza defensiva de Tagliaficco terminó en penal. Vidal remató, Martínez contuvo, la pelota se estrelló en el travesaño y Vargas llegó para empujarla de cabeza. Después Scaloni metió cambios, renovó todo el frente de ataque, pero nada cambió.
Las intenciones del elenco nacional chocaban con la ordenada defensa trasandina, Chile juega como equipo, sabe defenderse, y cuando ataca lastima. Argentina es un conjunto ciclotímico, sufre cuando lo atacan y no lastima arriba. El entrenador deberá encontrar pronto soluciones, consiguió su tercer empate consecutivo, sumando los dos encuentros por Eliminatorias Sudamericanas, pero en esta competencia, solo sirve ganar.