Eugenio Zaffaroni, ex juez de la Corte Suprema y juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, opinó que la quiebra del Correo Argentino era "lo que tenía que pasar" porque las ofertas del Grupo Macri fueron "absurdas" y aclaró que no hubo nada "ideológico" sino que se trató de un procedimiento normal ante una "deuda astronómica".
También manifestó su "bronca" por los dos mil días de Milagro Sala presa, hecho que calificó como "la vergüenza del derecho, para la conciencia jurídica argentina". Finalmente, sobre la reforma judicial, opinó que "si no se cambia algo, no se va a poder gobernar" porque se va a "obstruir toda medida de gobierno, principalmente las de carácter económico".
Sobre la quiebra del Correo Argentino, Zaffaroni opinó que: "finalmente pasó lo que tenía que pasar porque las ofertas eran ridículas frente a la enorme deuda del Grupo Macri con el Estado. Es un revés, querían evitar la quiebra del Correo"
Respecto al trámite, aclaró que alguien entra en cesación de pagos se convoca a los acreedores y "si ofrecen pagar el 10% es absurdo, no tiene sentido. El trámite de cualquier quiebra funciona de esa manera".
Mauricio Macri "se va a victimizar todo lo que pueda, pero ¿qué persecución política hay? Te ofrecen un 10% de la deuda que hay y eso no es un acuerdo, no tiene sentido".
"Si lo que te ofrecen una solución razonable, perfecto, pero esta es leonina" además "no hay nada raro, nada ideológico, es una deuda astronómica".
Respecto a los dos mil días de Milagro Sala como presa política, opinó que: "está presa por ser mujer, un presupuesto del patriarcado; después presa por india; después por pobre; está presa por dirigente popular, está presa por haberse enfrentado con un genocida del fondo del telón de la dictadura".
El caso de Milagro "es la mayor síntesis de lo que nos ha pasado a todos nuestros pueblos y me da mucha bronca". "Esto es la vergüenza del derecho, para la conciencia jurídica argentina" porque "se están jugando las reglas del Estado de derecho, de la democracia. Es una aberración", analizó el magistrado.
Sobre la actual Corte Suprema, Zaffaroni describió que "no tiene ideología, no se lo que va a hacer. A diferencia (de otras Cortes que tenían ideología) no la hay. No se qué función quieren cumplir. Es imprevisible. El único previsible es Rosenkrantz, te podés parar de la vereda de enfrente pero es previsible".
"Si no se cambia algo, no se va a poder gobernar porque se va a obstruir toda medida de gobierno, principalmente las de carácter económico", dijo sobre la reforma judicial.
"La Corte que tenemos es la más chica de todo el continente y toda Europa ¿en manos de tres personas puede quedar el control de constitucionalidad?". "Para los que se llenan la boca con la palabra república, toda concentración de poder es antirepublicana, eso es peligroso", agregó.
"Tarde o temprano va a tener que terminar en eso", en una ampliación porque la concentración de poder no es republicana.
Al gobierno "supongo que ganas no le deben faltar" para avanzar con la reforma, pero "yo estoy en la tribuna, ellos están pateando la pelota pero si no lo hacen, no van a poder gobernar".
