El servicio de taxis por la noche en Rosario se volvió nulo. Basta recorrer las redes sociales para recabar el testimonio de miles de personas que anoche buscaron vanamente un automóvil de alquiler para regresar a su hogar. Centenares de jóvenes deambulando por las calles en búsqueda de una unidad sin éxito, la mayoría de ellos regresó a pie a su casa. La ordenanza de alcohol 0 desalentó salir en sus propios autos.
No hay aplicación, radiotaxi, ni parada que valga. "Todas nuestras unidades se encuentran ocupadas, intente más tarde", o simplemente el tono del teléfono ocupado por horas, claro signo que fue descolgado. Los titulares aducen falta de choferes, los conductores trabajo en negro e inseguridad. Muchos padres interrumpieron su sueño y optaron por salir a las 3 o 4 de la mañana en búsqueda de sus hijos.
La Municipalidad advirtió y prometió duras sanciones. Además se dispone a poner unas trescientas unidades nuevas en las calles. Hay miles de unidades que deberían circular, por tener asignados horarios nocturnos. En medio de esto, piden incremento de la tarifa. Se les permitió recientemente posponer el recambio de unidades. El servicio agoniza, es hora de hacer algo.
