Rosario Central y Lanús protagonizaron un emotivo encuentro en La Fortaleza que terminó igualado 2 a 2. El Granate lo ganaba 2 a 0 y parecía quedarse claramente con el partido, pero un tal Marco Ruben metió dos goles en un minuto, y generó dos chances claras para ganarlo. En un final para el infarto, cualquiera pudo quedarse con los tres puntos.
A los pocos minutos de iniciado, Central entregó un gol como le pasó varias veces en este torneo. Tras un desborde por derecha, Lo Celso perdió la marca y López venció a Romero. Lanús se hacía dueño de las acciones, jugada mejor y parecía poder aumentar en cualquier momento.
Una guapeada de Ruben que pese a estar agarrado cedió para Marinelli generó la más clara de Central en la primera etapa. La pelota se fue muy cerca, apenas desviada. El local tuvo varias para irse a los vestuarios con mayor diferencia pero oportunos cierres agónicos evitaron que el resultado fuera más holgado.
En la segunda mitad, el eterno "Pepe" Sand puso el 2 a 0, casi abajo del arco y todo parecía terminado. Pero Ruben está jugando totalmente desnudo, en estado de gracia puso el descuento tras una gran habilitación de Vecchio, que pese a estar disminuido puso mucho amor propio para mantener viva la esperanza. En en un minuto más, tras un remate de Lo Celso, la pelota rebotó en Ruben y se metió en el arco para igualar en 2 tantos por equipo.
Los últimos 10' fueron para el infarto, tras un cabezazo Ruben habilita a Martínez Dupuy y el mexicano estrelló la pelota en el travesaño tras superar por arriba al arquero, era el 3 a 2, pero el caño lo evitó. Enseguida, la defensa pierde a Sand y el veterano encara a Romero, que llega a desviar y cuando se metía, Garay logra desviar sobre la línea. Y Marco, de cabeza tuvo la última, metió la cabeza en un centro, el arquero detuvo a medias y cuando estaba por ingresar y ser empujada, logran despejar.
El elenco del Kily no jugó bien, estaba para perder, pero la dupla Vecchio Ruben lo puso en partido y hasta pido vencer. Tuvo dos chances muy claras para llevarse una victoria que por lo sucedido durante el encuentro no hubiera sido justa. Pero, goles son amores y Ruben está encendido y enciendo la ilusión de una nueva competencia internacional en Arroyito.
