La novela del verano en Rosario Central se llama Juan Cruz Komar, pero parece que va llegando a su fin. Finalmente, el presidente de Talleres de Córdoba, Andrés Fassi accedió a negociar la compra de la mitad del pase del defensor con el Canalla. No será fácil, todas las posibilidades están sobre la mesa, la cotización inicial de 3 millones de dólares, demasiado elevada para el mercado local es todavía un obstáculo, y otro insalvable, es la no disponibilidad de dinero en las arcas auriazules.
Pero el jugador quiere jugar en Central, el Kily González lo considera prioritario y la dirigencia trabajará para concretar la llegada del marcador central que tanto necesita el elenco rosarino. Ayer se habló de la posible salida de Gino Infantino, Lucas Martínez Dupuy es otra posibilidad, son dos puestos en los que Central tiene recambio, podría ser porcentaje del pase de alguno de ellos, o un préstamo a la T, habrá que ver.
La reacción de los socios y simpatizantes de Central cuando se habló de la posible venta de Infantino no fue la mejor, el chico, con apenas algunos partidos en la primera canalla, y de gran futuro tiene seis meses de contrato por delante y están avanzadas las charlas para sellar su continuidad, pero podría emigrar si entra en la negociación. Es cierto que el juvenil mostró grandes habilidades en lo poco que le tocó jugar y que su precio podría ser en el futuro millonario en dólares, su valor no tiene techo hoy.
Lo que ya no se discute, y en principio sería la primer parte del acuerdo es que el club de la capital mediterránea se quede con el 35% del volante Rodrigo Villagra, adquirido en el libro de pases anterior. El albinegro había pedido parte del pase de Lautaro Blanco, algo que en Central no están dispuestos ni a discutir, es el jugador a vender sí, pero no en porciones y su pase no es negociable. Komar cumplirá su sueño y jugará en Central el próximo semestre, resta saber a cambio de qué.
