El defensor de Talleres de Córdoba, Juan Cruz Komar, confesó hincha canalla, expresó ayer sus deseos de sumarse al equipo que dirige el Kily González, sin embargo, la negociación no parece sencilla, ya que las pretensiones del equipo de la capital mediterránea no parecen estar a la altura de la tesorería auriazul.
El entrenador reclamó la contratación de al menos dos marcadores centrales. Hay negociación abierta por Joaquín Novillo, de Belgrano de Córdoba, Mauricio Martínez de Racing, que quiere venir pero Racing no está apurado en desprenderse de él y no habría que descartar a un viejo conocido, Javier Pinola que quedaría muy relegado en River, con la llegada de dos nuevos jugadores en su puesto.
Pero Komar es la debilidad del Kily, el jugador lo sabe, y la dirigencia actúa en consecuencia. Talleres pidió porcentaje de juveniles canallas a cambio, más la cesión del 30% que Central conserva de Rodrigo Villagra. En esos términos la dirigencia rosarina no está decidida a negociar, no está dispuesta a desprenderse de porcentajes de jugadores cuya cotización podría ser millonaria en el futuro, y todo podría fracasar. El jugador quiere, Central por ahora no puede.
