El Gobierno argentino acompañó ayer en una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) un proyecto de Resolución referido a la situación humanitaria generada en Ucrania a raíz del conflicto bélico con Rusia, que exige "el respeto de los derechos humanos y el cese inmediato de actos que pueden constituir crímenes de guerra".
"Cuando se defiende la paz, los derechos humanos y la situación de los refugiados en un lugar, pero se la silencia y oculta en otros, entonces la paz deja de ser una cuestión de principios, para ser una toma de posición o un alineamiento geopolítico. Por eso fui muy claro al decir que defendemos esto en todas las situaciones y todos los lugares donde suceda", señaló el embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, al fundamentar el voto de Argentina en favor de esta resolución de carácter humanitario.
En el texto de la declaración, la OEA pide que se establezca en la zona "un paso seguro y sin restricciones a destinos fuera de Ucrania, y facilitar del acceso rápido, seguro y sin trabas a la asistencia humanitaria sin discriminación basada en el origen, raza, nacionalidad o etnicidad".
La Resolución condena "todas las violaciones del derecho internacional humanitario y las violaciones y abusos de los derechos humanos y exhorta a todas las partes a que respeten estrictamente las disposiciones pertinentes del derecho internacional humanitario, incluyendo los Convenios de Ginebra de 1949 y el Protocolo Adicional I de 1977, según proceda, y a que respeten el derecho internacional de los derechos humanos".