La Unidad de Información Financiera dispuso este miércoles controlar la situación patrimonial de los dueños de los vehículos que superen los 5 millones de pesos en su valor. El organismo se encarga de vigilar y combatir el lavado de dinero.
Se dispuso mediante la resolución 51/2022 publicada en el Boletín Oficial a primeras horas de este miércoles. Según establece, la normativa alcanza a los “clientes que realicen las operaciones a las que se refiere el artículo 2° de la presente sobre Automotores por un monto anual que alcance o supere la suma de $5.738.075“.
Teniendo en cuenta esta decisión, la medida involucra a vehículos importados de alta gama pero también a otros de rangos más bajos. Al valor libre de 5,7 millones de pesos son poco más de 28.000 dólares.
Tal como señalaron fuentes competentes al tema, el SUV Taos de Volkswagen, que se fabrica en el país, está alcanzado por la medida. Varias camionetas usadas en el campo superan esa valuación, como configuraciones de la S10 (Chevrolet), Amarok (VW), Hilux (Toyota), Toro (Fiat), Frontier (Nissan) y Ranger y F100 (Ford); y utilitarios, entre otros.
