La seguridad en los ingresos y egresos de las cárceles representan un verdadero desafío para el sistema penitenciario. Un informe publicado en 2021 indicaba que durante os primeros siete meses de ese año el Servicio Penitenciario había secuestrado 3.656 celulares ingresados de manera clandestina a los penales de la provincia, que ese momento contaban con 7.050 internos. Es decir, un teléfono cada dos detenidos. De acuerdo a los datos oficiales, durante 2022 se retuvieron 5.747 equipos.
En ese contexto, desde el 2022 el Gobierno avanzó con la compra de equipos y tecnología de última generación destinada al control en los ingresos tanto para las visitas como para el propio personal. En ese sentido, la primera experiencia donde se aplicó es la flamante Alcaidía de Santa Fe, inaugurada en octubre en Las Flores, donde se incluyó un moderno sistema de seguridad que consiste en dispositivos que funcionan con rayos X.
Con la participación del flamante ministro, hoy se pondrá en funcionamiento en Coronda los "body scan", aparato que utiliza rayos x para poder observar bajo algunas capas físicas, como ropa, la piel, etc. El sistema permitirá detectar amenazas ocultas o, incluso, dentro del cuerpo o en las cavidades corporales, como por ejemplo armas metálicas y no metálicas, drogas, teléfonos celulares, contrabando de todo tipo, explosivos, herramientas.
Por último, la instalación también contempla un detector de metales.
También habrá un arco detector de metales, que principalmente apunta a controlar el ingreso de celulares. "Eso es lo que se instaló, todavía no está funcionando formalmente. Estamos en etapa de prueba. Pero ya está instalado en Coronda”,detalló Gálvez, quien adelantó que la misma instalación se realizará en el penal de Piñero a partir del próximo lunes.